Bella le cuenta a Will cómo se convirtió en sirena. Bella tenía solo 9 años. Sus padres y ella vivían en Irlanda. Un día fue a investigar la zona y se sintió atraída por el mar, así que acudió a él, hasta llegar a los acantilados. Descubrió una cueva por la que entró, allí había una pequeña charca y, justamente cuando pasaba la luna llena por encima, se metió en ella. Se cree que los poderes afectaron a Bella más rápido porque era más pequeña cuando le ocurrió la metamorfosis.
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